LA VIDA SIEMPRE, PUEDE IR A MEJOR - Adelaida Coaching
1552
post-template-default,single,single-post,postid-1552,single-format-standard,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-theme-ver-9.1.3,wpb-js-composer js-comp-ver-4.11.2.1,vc_responsive

LA VIDA SIEMPRE, PUEDE IR A MEJOR

La vida siempre puede ir a mejor

24 Mar LA VIDA SIEMPRE, PUEDE IR A MEJOR

Soy de la opinión de que la vida siempre puede mejorar. Mi madre suele reírse y decir “pues sí, mejor verlo positivamente” y cuando no se da cuenta se le escapa y dice que tengo “mucha fantasía”. Pero yo prefiero llamarlo ilusión, fe, paciencia o mente abierta que puede que sea lo mismo pero que dicho de esta manera aporta más valor.

Y es que yo me niego a creer que todo lo que me pasa, es real al cien por cien. He dejado de creer que sólo hay una realidad y que debo aceptar lo que la vida me da. No me lo creo porque ya sé que todo puede cambiar y siempre a mejor. Gracias a mi espíritu anárquico he ido demostrándome que nada es completamente verdad y que la vida siempre pone su mejor sonrisa pero que no la vemos porque nos hemos acostumbrado a sufrir y ya no creemos las bondades que ésta nos ofrece.

Así he llegado al punto en el que estoy ahora, agradecida hasta el infinito por este espíritu mío aventurero e inconformista.

Recordando el pasado veo los años en los que no entendía porque mi cuerpo no me acompañaba y me dejaba sola a mitad del camino de mi vida. Me sentía encerrada y pesada como en una cárcel en la que sólo podía observar cómo mi interior se marchitaba. Recuerdo llorar y pedir en mi interior ver la luz de la solución que diera por finalizado el sufrimiento. En serio que pensaba, en medio del cortocircuito de mi cuerpo, que ya había aprendido la lección y que si eso era un castigo ya me había dado por enterada.

Ahora me doy cuenta de que no me enteraba de nada y de que con mi actitud no estaba mandando ninguna señal positiva para que me quitaran “el castigo” si no más bien estaba enfocándome más y más en el problema.

Y quizá fue porque pedí mucho, fui muy insistente o porque me negué a aceptarme tal y como me estaba viviendo que empezaron a venir personas y situaciones a mi vida que me hablaban de que mi cuerpo respondía a lo que mi mente proyectaba. No te creas que esto lo acepté a la primera de cambio, porque por aquel entonces yo tenía mucho orgullo.

La vida continuó mandándome a personas que habían superado enfermedades gracias a un cambio de vida y de mentalidad. Y casi cada día coincidía con ejemplos de superación que me dejaban sin palabras y me mostraban una realidad muy diferente a la que conocía.

Yo esto no se lo contaba a mi madre porque ella hubiese dicho que eran todo fantasías, pero a mí el gusanillo de la curiosidad ya se me había despertado y quería investigar. Al fin y al cabo, no podía perder nada porque entre observar mi cuerpo que parecía que iba por libre y empezar a buscar soluciones, me pareció que la segunda opción aportaba más valor.

Busqué, medité y escudriñé dentro de mí y mi mente. Y como quien busca siempre encuentra, logré identificar varios focos de mis problemas físicos. No te hablo de secretos horribles e inconfesables, eran creencias y formas de ver la vida que las tenía tan ancladas en mí que habían empezado a germinar en mi cuerpo. Al final lo entendí: “lo que crees, creas”.

Creas tu vida y modificas tu cuerpo, porque aunque sea de manera inconsciente sigues creando sin darte cuenta hasta que un día ves el resultado en forma de enfermedad. Yo lo vi y humildemente acepté mis sombras porque eran parte de mi.

Yo era esa mujer que se sentía en desventaja delante del género masculino por el hecho de poder crear vida. Era esa persona que no estaba agradecida de ser mujer. Había hecho un pacto conmigo misma para que la maternidad no me convirtiera en lo que yo creía que una mujer con hijos era. ¡Qué suerte haberme dado cuenta de que lo que yo creo, no es la verdad absoluta!

Así que con mi espíritu aventurero, reaprendí a vivir. No fue fácil porque lloré y pataleé. Me entro pereza, incredulidad y rabia. Pero un buen día tomé conciencia de que a los hijos se les acepta como se acepta la vida, porque una vez estás viva no lo cambias por nada. Y esperar una vida con expectativas es negarse a vivir la ilusión de lo nuevo.

Y es que tenía tantas expectativas sobre mi misma que no dejaba que nada espontáneo pasara y cuando me rendí a la vida, llegó ella. Y mi niña, que todavía no ha nacido, ya me ha confirmado que con ilusión, fe, paciencia y mente abierta la vida siempre puede ir a mejor.

 

¿Cuál ha sido el resultado que has obtenido cuando has confiado en que la vida puede irte bien?

6 Comentarios
  • Mercedes Ramirez Peñalver
    Publicado a las 12:53h, 29 marzo

    Adelaida, mi mas sincera enhorabuena, por la superación de tus problemas y por tu niña.

    Y doy gracias de forma personal,por poder aprender de tus ejemplos, ojala así sea y pueda yo también, tomar conciencia y dar ese cambio que tanto necesito. Por mi propio bien y el de mi hija.

    Un fortísimo abrazo.

    Merche

    • Adelaida Enguix
      Publicado a las 17:23h, 06 abril

      Muchas gracias, Mercedes.

      Estoy segura que superarás los bloqueos que tienes en estos momentos y tomarás conciencia de para qué necesitas vivirlos. Lo mejor de tener una vida consciente, es poder agradecer el camino.

      Un abrazo muy fuerte.

      Adelaida.

  • maria luisa
    Publicado a las 10:07h, 27 marzo

    siento que he dejado pasar el tiempo sin sacarle todo el jugo apesar de tener dos hijas maravillosas y tener una nueva pareja sigo viviendo deprisa pero aun asi estoy aprendiendo y mucho de tus consejos y doy gracias por estar a tiempo de mejorar como persona

    • Adelaida Enguix
      Publicado a las 17:25h, 06 abril

      Maria Luisa, el hecho de darte cuenta de las maravillas que tienes en tu vida ya es un paso. Mejorarás porque así lo deseas y ahora ya lo estás consiguiendo, a tu ritmo que es perfecto.

      Un abrazo!

      Adelaida.

  • erica sokolowski
    Publicado a las 13:11h, 24 marzo

    hermosisimo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! muchas gracias por compartir tanta belleza! namaste!

    • Adelaida Enguix
      Publicado a las 14:46h, 24 marzo

      Muchas gracias por tus palabras, tan bonitas!!

      Un abrazo,
      Adelaida